A Jack Ma le ocurrió lo mismo que a tantos innovadores en el mundo, ¡lo tomaron por loco! El cofundador y presidente ejecutivo de Alí Babá, la primera empresa de comercio electrónico por Internet de China es hoy el hombre más rico de ese país asiático.
Jack Ma es profesor, tenía 35 años cuando fundó Alí Babá y hoy se retira con 54, los ha cumplido precisamente este lunes 10 de septiembre cuando en China se celebra el día del maestro.
De dios del dinero a filántropo
Es venerado como si fuese divino, incluso su flamante retrato luce en las paredes de muchos hogares chinos donde lo adoran igual que al dios de la riqueza, explica el New York Times.
Tiene una fortuna de unos 40 mil millones de dólares y su consorcio está valorado en 420 mil millones. Ma, cambió para siempre los hábitos de compra de los chinos, un pueblo adicto a la electrónica en un país donde la telemática le lleva años luz de distancia a sus competidores estadounidenses.
El pasado viernes 8 de septiembre, el NYT lanzó la noticia, Jack Ma se retira para dedicarse a la filantropía en la educación que es su profesión original como profesor de inglés.
Entre gatos y ratones
Antes de él, los hombres más ricos de China eran los magnates de la construcción, fue la época en que el sistema comunista ya había asimilado la doctrina liberal del viejo líder Deng Xiaoping: No importa si el gato es negro o blanco, lo importante es que cace ratones.
Y así los chinos, del comunismo más recalcitrante se abrieron a la economía de mercado con todos los riesgos que ello supuso.
Jack Ma no parecía el gato sino el ratón de esta historia, es bajito y feo, y él lo sabe (parece un marcianito), no cumple con el código fashion del lifestyle occidental pero eso le importó un bledo.
De paso, ha sido rechazado en casi todas partes, en la academia de policía de su país, en la cadena KFC, en Harvard. «No soy bueno con los números, nunca estudié administración y hasta la fecha no puedo leer un reporte de contabilidad» dijo Ma en una ocasión según el cronista Alp Mimaroglu del portal Entrepreneur.
En fin, era el candidato perfecto para convertirse en un loser pero eso nunca ocurrió; periodistas, biógrafos y expertos coinciden en que lo asombroso de este profesor de inglés (casi que autodidacta) no es su caudalosa fortuna y el poco tiempo en que la ha amasado sino su persistencia y terquedad.
Alí Babá y su cueva del progreso
En 2014, Ali Baba Group que había sido fundada en 1999 se transformó en la mayor compañía de comercio electrónico del mundo para entrar en la galería de las grandes como Apple, Google, Microsoft y Facebook entre otras.
Y pensar que en sus inicios los inversionistas de la bolsa de Nueva York la miraban por encima del hombro, «¿comprar a través de una computadora con aplicaciones de pagos digitales?, este chino es un chiflado», dirían en aquella oportunidad los mismos que 15 años luego terminarían aplaudiéndolo.
Donde muchos ya hubiésemos tirado la toalla, gente como este empresario chino insisten porque algo los mueve desde el fondo de su alma. ¿Qué cosas?, ya mencionamos la persistencia, ahora vamos con el sentido común.
En 2018, por ejemplo, en el Foro Económico Mundial de Davos en Suiza declaraba que mientras Estados Unidos se había gastado más de 14 billones de dólares en treinta años de guerras y armamentismo, China había mejorado su infraestructura y de hecho hoy sigue tendiendo las redes de ferrocarril más largas del planeta entre Asia y Europa.
El tercer factor es la intuición, hace 20 años en China casi ni existían las computadoras pero con el boom de la telefonía móvil el comercio electrónico entró en auge y ahora la gente puede comprar desde cualquier parte del mundo mientras va caminando, sin necesidad de salir de casa ni entrar a una tienda. El portal Intereconomía revela que desde China salen hacia Rusia más de un millón de paquetes a diario.
¿Por qué te vas?
Se especula sobre su retiro prematuro, el NYT piensa que lo hace porque el entorno comercial de China se ha deteriorado, «con Pekín y las empresas estatales desempeñando cada vez más roles más intervencionistas con las empresas».
¿Sentido común? Internet ya sabemos que es uno de los dolores de cabeza de los férreos controles en China, la economía también enfrenta la desaceleración del crecimiento y el aumento de la deuda, además de que el país está envuelto en una guerra comercial in crescendo con Estados Unidos. Good luck Mr. Ma.